Sobre el grado 0 de la paralipsisness

Habiendo estudiado, leido y releido el primero de los capítulos del texto fundacional de la paralipsisness, desde la escuela de Manhattan discutimos, polemizamos, refutamos:

El grado 0 de la paralipsisness, o como algunos han querido llamar, el estado de no paralipsisness absoluta, es una mentira, y si bien no apoyamos a los demagógos de turno que se atreven a decir que ha sido una vil calumnia que creo confusiones y cambios de poder a través de generaciones, es mejor realizar ciertas precisiones.

Primero, lo que se ha tomado como el grado 0 de paralipsisness no es más que una generalización que hace poca justicia por otro lado a la falta de paralipsisness, el vacío que genera ésta al existir, concepto apliamente tratado en las teorías apocalípticas paralipsisnéticas, pero esto será tema de otro capítulo.

Segundo, La paralipsisness puede ser positiva o negativa, pero nunca nula (aceptando claro está, que el vacío de paralipsisness no es ni positivo, ni negativo, ni nula, solo la falta última de aquella)

Tercero, y aquí creemos desde nuestra escuela que los puntos de inflexión han sido descuidados durante demasiado tiempo, la paralipsisness es, como no puede no ser, existe y se mueve, pero no desde las concepciones clásicas del atrás hacia adelante y del arriba hacia abajo, la paralipsisness se mueve a través de la vida de las personas, y estas personas están siendo atravesadas por la paralipsisness todo el tiempo, aunque ellos no se den cuenta de tal. Es decir que, aunque el humano común no se dé cuenta de la realización de la paralipsisness no quiere decir que esta no ocurra, la capacidad de proyección de nuestra conciencia no le hace justicia a la paralipsisness. En este punto creemos se encuentra el límite de la paralipsisness, que como fuerza creadora del universo no puede dejar de existir, y esto quiere decir que, si bien positiva o negativa como hemos dicho, es, y cuando tratamos de encontrar los puntos en los que la paralipsisness trata de encontrarse con 0 (debido al alto grado de grunge que posee y tiende hacia la autodestrucción), esta fracasa rotundamente, porque la falta de paralipsisness significaría la muerte de la fuerza, junto con el Eros y el Thanatos, y por consiguiente, el fin del mundo.

Como muchas otras grandes mentes a través de la historia, hemos analizado el límite de la paralipsisness para llegar, mediante herramientas nunca antes usadas que nos brindan los nuevos supuestos de la física cuántica, a conclusiones nunca antes abordadas.

Como se demuestra en lo siguiente, siendo C la paralipsisness y X el coeficiente de paralipsisness, se demuestra tanto la existencia de esta como su inhabilidad de encontrarse con 0:

De la siguiente realización, solución bastante simple aunque negada a lo largo de la historia, podemos extrapolar los resultados hacia el gráfico:

En la anterior vemos como si bien la paralipsisness (y por extensión la antiparalipsisness) tratan de encontrarse con 0, tienden hacia el infinito, sin poder tocarlo.

De esta manera queda demostrada la inexistencia del grado 0 de la paralipsisness haciendo uso de las nuevas teorías físicas, una simple acotación del término en cuestión, pero que aclarará ciertas dudas para los estudiosos del fenómeno.